Que
lo ponga de su bolsillo
Isidro
Jiménez Ortiz
Que desfachatez del regidor segundo del
Ayuntamiento de esta ciudad Arturo Fariña Pavón al pretender erigirse en gestor
social pero sin invertir ningún recurso de su propio bolsillo, resulta
criticable que queriéndose pasar de vivo y brincándose las trancas como
vulgarmente se dice, de su puño y letra envía vales a la empresa comercial
“Casa López Miranda” donde solicita 3 bultos de cemento y 10 metros de
alambrón, pone su nombre y cargo, lo firma y lo sella, lo que ignora este
funcionario es que toda casa comercial tiene instrucciones que para poder
entregar algún material debe ser autorizado por el Presidente municipal y
avalado por la Contraloría municipal, pero el regidor Fariña Pavón pareciera
que ha olvidado que ya no está en los tiempos en que despilfarró a su antojo
porque todo se lo permitía el entonces alcalde Rafaél Fararoni Mortera, hoy son
otros tiempos los que soplan a la actual administración que no permite que
ningún edil se quiera ir por la libre porque para eso existe un control en el
manejo de los recursos públicos y materiales.
En el caso del regidor Arturo Fariña Pavón y
de otros ediles, estos reciben jugosas prerrogativas que van mas alla de su
salario y si quiere ser gestor del pueblo y erigirse como el gran mesías debe
llevar esos apoyos pero pagarlos de su sueldo y no como lo estipula en el vale
enviado a la casa López Miranda en la que dice “Facturar a nombre del
Ayuntamiento”, vaya cinismo de éste funcionario, pretende pasársela de noche al
alcalde, pero como dice el refrán para uno que madruga, otro que no duerme,
Fariña Pavón queriéndose pasar de vivillo de un tajo le cortaron las alas, debe
ubicarse que ya no está en el gobierno de la opulencia, donde todo se podía
hacer y deshacer, hoy en la administración de Rosendo Pelayo existe orden y
jerarquización en la aportación de los recursos a quien se pretende ayudar.
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