Expediente 2014

Luis Velázquez

Veracruz, pacificado

Desde hoy nuevo espacio informativo. Tendedero. El bueno, el malo, el feo, el mesiánico, el alburero, la barbie, y a la baja y la alta. Búsquelo espacio abajo...

Fernando Gutiérrez Barrios fue gobernador de Veracruz durante dos años, suficientes para entrar a la historia y considerarse el mejor en la historia del Veracruz contemporáneo. Del segundo tramo del siglo pasado a la fecha.

Entonces, como ahora, el gran pendiente social era la inseguridad. Agustín Acosta Lagunes le había entregado un territorio estatal dominado por “La Sonora Matancera”. Un Veracruz sembrado de caciques regionales y pistoleros.

En la sierra de Huayacocotla, Luis Rivera Mendoza. En Chicontepec, los hermanos Justo y Roberto Cabrera Sahagón.

En el perímetro Córdoba, Omealca, Tezonapa, Toribio “El toro” Gargallo. En la zona conurbana Veracruz-Boca del Río, Felipe “El indio” Lagunes Castillo.

En el sur, Cirilo Vázquez Lagunes.

A los siete días de su toma de posesión, diciembre de 1986, Gutiérrez Barrios tuvo la oportunidad de oro para actuar. Y operó.

En Huayacocotla, Luis Rivera Mendoza y sus sicarios emboscaron a una familia. Mataron a los padres. Y a sus dos hijos. A un niña de dos años de edad le dieron el tiro de gracia.

Al otro día, el gobernador envió a su equipo de seguridad con una sola orden, inevitable: detener al cacique y los pistoleros.

Y cuando aprehendieron a todos, sin excepción, de inmediato, custodiados los llevaron derecho al penal de Pacho Viejo y ahí los concentraron, sujetos a un juicio penal.

El 10 de enero de 1987, 40 días después, el cacique del sur de Veracruz, Cirilo Vázquez fue detenido acusado de posesión de armas de uso exclusivo del ejército y con sus pistoleros, encerrados en el penal de Allende.

Una semana después, Toribio “El toro” Gargallo emprendió la graciosa huída de Veracruz.

Y aun cuando las banditas proliferaron, integradas con los sicarios de aquella “Sonora Matancera”, el mismo Gutiérrez Barrios dio seguimiento a la cacería de todos.

Antes de tres meses nada quedaba del Veracruz de Agustín Acosta Lagunes.

Policía político, don Fernando se mantuvo firme. Incluso, en el penal de Allende Cirilo Vázquez se quiso pasar de tueste y armó una huelga de hambre de los internos.

Y el mismo gobernador lo volvió a encarar. Fue al reclusorio y habló con claridad, sin rodeos ni medias tintas, por más cacayacas del cacique, quien siempre se creyó parido por los dioses, pues, y por ejemplo, mantenía doblegado a Acosta Lagunes.

Incluso, semanas después envió al cacique a un penal de alta seguridad de Puebla.

La mano firme. El puño y el manotazo bien dado. Veracruz, pacificado desde el palacio principal de Xalapa.

ASÍ, COMO AHORA, A NINGÚN DESTINO SE LLEG

Tres años y medio después del sexenio próspero la prioridad número uno es la misma que en diciembre de 1986 cuando Gutiérrez Barrios asumiera el poder estatal.

En aquel entonces se llamaba “La Sonora Matancera”. Ahora, son los carteles. Y, por añadidura, la delincuencia común.

Cierto, la trayectoria de don Fernando como un político policiaco estaba a imagen y semejanza del problema.

Pero, además, tenía un gabinete de seguridad de primer nivel.

Y, por añadidura, el equipo pesado que tenía en la Secretaría de Gobernación como jefe máximo de la policía federal también fue importante.

Ahora, sin embargo, hay un coronel en Seguridad Pública confiado en que portando el uniforme en los eventos oficiales los cárteles se arrugarán.

También hay un Almirante en la Agencia Veracruzana de Investigaciones, Rogelio Gallegos Cortés, que fue Oficial Mayor del Ayuntamiento de Matamoros, Tamaulipas.

Y un procurador de Justicia que gusta de escuchar y mirar todos los días el programa de TV Azteca, Ventaneando, y que suele demorar mucho tiempo en el espejo y que horas después de tomar posesión declarara que apenas llegó al cargo “los carteles huyeron”.

Y, bueno, así, a ningún lado ni destino se llega ni camina.

Está claro que ni el Veracruz seguro ha dejado resultados concretos y específicos.

18 AÑOS DE IMPUNIDAD

Para la historia está claro el siguiente antecedente: con los exgobernadores Fidel Herrera, Miguel Alemán Velasco y Patricio Chirinos Calero los carteles operaron, digamos, con un bajo perfil.

Ahí estuvieron los 18 años, haciendo negocios con la droga, primero, con un bajo perfil, y segundo, digamos, a partir de un pacto. Operen; pero cero violencia.

Ahora, por el contrario, y a partir, digamos, de la mitad del sexenio del góber fogoso, Felipe Calderón Hinojosa presidente, el Ejército fue sacado a la calle para declarar la guerra a los señores de la droga.

Y desde entonces la vida en el país y, por añadidura, en Veracruz, es un infierno.

Ni hablar, estamos a la mitad del río avasallante.

Quizá, y como afirma el politólogo Carlos Ronzón Verónica, una salida sean los modelos Michoacán y Tamaulipas. Pero, con todo, ni en uno ni en otro estado puede cantarse victoria.

El titular del último número del semanario Proceso, 1962, lo dice todo: ‘’Tamaulipas, la guerra’’.

La guerra que ya está y que habrá de recrudecerse de norte a sur de Veracruz.

Si, por ejemplo, Gutiérrez Barrios fuera hoy el gobernador, la duda es si habría dado el mismo resultado de eficacia y eficiencia que entonces cuando “La Sonora Matancera”.

Si el gobierno próspero lograra pacificar Veracruz y controlar y abatir la deuda pública… sería suficiente para entrar a la historia con una gran investidura política.

Nada enaltecería el diario vivir como, por un lado, reducir al máximo el fuego cruzado, los muertos, los secuestros, los desaparecidos y las extorsiones; por el otro, hacer justicia en el caso de todas las víctimas.

TIPS PARA VIVIR MEJOR

Sorpresas que da la vida: Héctor Yunes, aliado de “Niños infieles”.

Ningún político en Veracruz con liderazgo social para candidatura ciudadana.

Elizabeth Morales, de candidata ciudadana sufriría espantosa derrota.

Fuera del PRI, como candidato ciudadano, todos los priistas, derrotados.

Veracruz, tercer lugar nacional en chicas embarazadas. Recado a Astrid.

Triunfalismo de Jorge Carvallo: que CONEVAL aprobará con 10 a Veracruz.

Una vez más, vecinos de Laguna Verde, en protesta. Están olvidados, dicen.

Populismo educativo. Crearán Universidad del Petróleo en Veracruz.

Si Veracruz aclara paradas a Auditoría Superior de la Federación, Spinoso y Deantes, salvados.

Si PGR a ningún político fiel investiga, Spinoso y Deantes ya la libraron...

Si algo ha dolido al gobierno de Veracruz es activismo de Fernando Yunes en Senado.

Miguel Ángel Yunes Linares, candidato a diputado federal pluri del PAN. Regalito de Madero.

Cuatro muertos más en Veracruz. Ahora, en Alto Lucero. Veracruz, un infierno.

Atrás de iniciativa de ley del PAN (2 años de gobernador) están Erick Lagos y Motita.

1a. manifestación vs Pepe Tello, de SAS.

Repavimenta Américo Zúñiga calle de su padre en Xalapa. El orgullo del nepotismo.

Renuncia titular de Sedeco en Michoacán... harto del Comisionado Peñista.

Nuevo avión de Peña Nieto cuesta $7mil 520 millones. El país, en el desempleo.

Si gritan “asesino” a Peña Nieto en España... está canijo