Por Felipe Bustos García
EL FRACKING HACENDARIO Y LA EDUCACIÓN.
El fracking en
Hacienda Federal por 124.300 mil millones de pesos, por más que se intente
presentar como una maniobra normal de conducción en el timón de las finanzas
públicas con la cual se logra estabilizar el barco llamado México, significa y
quiere decir, para la población, que habrá PARO o sea escasez laboral, recortes
de empleados en las empresas, parálisis productiva en muchos renglones, falta
de oportunidad para los millones de jóvenes en busca de ocupación.
En suma, la detención
y suspensión de obras y acciones de Gobierno, repercutirán gravemente en el
sustento diario de millones de familias que dependen de las iniciativas y obras
previstas en sus planes anuales.
En su exposición, el
Gobierno ha planteado fríamente la situación y ha anunciado medidas que suponen
mantendrá la estabilidad financiera.
Ha dicho el
Secretario que habrán de depurarse los Programas sociales que estén
duplicando su operación, se reducirá la contratación de personal eventual,
habrá contracción en gastos de operación de dependencias, no se agregarán más
personas al programa de pensiones a adultos mayores, ya no más televisiones de
obsequio por el apagón analógico,
Se suspenderán las
grandes obras que transformarían a México.
Hablando claro
y en pocas palabras, el preámbulo de lo que puede convertirse en una grave crisis,
tal vez no del gobierno que está asegurado y blindado con reservas, pero sí de
la población que vive al día y sin soporte alguno que le ayude a encarar
situaciones imprevistas y soportar escases y penurias por un plazo prolongado.
EL RETO ES GRANDE y
ya está allí y hay que afrontarlo. No con remedios caseros ni chiqueadores. La
solución es a LARGO PLAZO Y NO ACABAMOS DE ENTENDERLA. NO PODEMOS SEGUIR
DEPENDIENDO EXCLUSIVAMENTE DE LA EXTRACCIÓN DEL PETRÓLEO.
lo dijo muy claro
hace apenas una semana el Presidente ENRIQUE PEÑA NIETO: La única solución a la
superación de nuestro rezago económico comunal y el logro de nuestro despegue e
incorporación al mundo de la modernidad, LO ES LA EDUCACIÓN.
Nos falta mucha
preparación universal en la ciencia y la tecnología. Nuestras generaciones de
jóvenes no son estimulados ni aprovechados preparándoles para la innovación y
la recreación de los avances logrados ya por otros países y cuando eso sucede
lo es por iniciativa propia y se quedan en las naciones que les reciben y
desarrollan científicamente.
Si bien lo dicho al
oído al Presidente Clinton por su jefe de asesores: “Es la economía estúpido”,
es una gran verdad y es hoy por hoy la razón que mueve al mundo, la economía
moderna se sustenta en la ciencia y la tecnología y las innovaciones que de
ella se hagan, revolucionando las necesidades vitales y complementarias de la
población mundial, produciendo consumos que nutren los recursos. En pocas
palabras, necesitamos innovar y producir – entre muchas otras cosas- nuestros
propios combustibles. Para ello requerimos de una generación de mexicanos más
aptos a los retos del avance científico y tecnológico. NO FORMARLA AHORA HARÁ
QUE TENGAMOS QUE ENFRENTAR CRISIS RECURRENTES COMO LA ACTUAL.
Ser o no ser,
adaptarse o morir, es el reto del mundo y de México. Tenemos de sobra lo que le
falta a los países viejos: Una juventud vigorosa que se renueva constantemente.
Lo único que nos hace falta es impulsarla y darle los medios para que asuma su
responsabilidad y tome las riendas de este barco para ponerlo a flote y
llevarlo adelante por los caminos que el propio futuro de una humanidad
cósmica – a la manera de Vasconcelos- va señalando.
No hay comentarios:
Publicar un comentario